Bajo la cobertura de la mayor crisis sanitaria de nuestros tiempos, las tramas capitalistas se aceleran y se profundizan: cierre de centros de trabajo, pérdida de empleos, intromisión digital en la vida privada, automatización masiva, profundización de normas sociales autoritarias y restrictivas, impunidad frente a la colonización, guerra y apropiación de territorios, nuevos hábitos de vida y la despiadada concentración de la riqueza